Volver

 

 

NO VOTE o ANULE SU VOTO

 

 

Por Santiago Roque Alonso   

 
NADA CAMBIÓ TODO EMPEORÓ

 
Este mismo subtítulo utilizamos para iniciar nuestro comentario el mes de abril. A un mes de dicha afirmación, volvemos a sostener lo que es sabido por todos: la situación se agravó aun más. La decadencia Argentina pareciera que tiene una profundidad infinita.

 
Sin embargo, percibimos que ha comenzado a gestarse una esperanza: son más los que están tomando conciencia del desastre en el que estamos sumergidos. Hasta hace unos pocos meses esta situación era impensable. El “voluntarismo optimista, mágico y resignado” disimulaba todo bajo la falsa sensación de la suprema y profunda sabiduría de los “practicones” que dice: “siempre que llovió paró”.

 
Pero en el caso Argentino pareciera ser que la lluvia no para. Como consecuencia de ello se observa una agitada actividad que se expresa en múltiples, reiteradas y maratónicas reuniones de todo tipo, niveles y propósitos. En ninguna de ellas faltan los “desesperados”, que expresan vehemente su “apuro” porque “algo hay que hacer ya, urgente, el país se desintegra”.

  
Como tenemos buena memoria, además, por haber soportado algunos desaires en años previos, no podemos dejar de recordar que muchas de esas personas son las mismas que hasta hace no tanto nos miraban con aire de superioridad intelectual e indiferencia - como del que se las sabe todas y ve debajo del agua –frente a lo que en ese momento eran nuestros planteos, alertas y alarmas respecto al futuro negro que avizorábamos, pero que ahora no permiten que se pierda un solo minuto.

 
Pero no se engañe, de la enorme cantidad de reuniones es muy poco o nada lo que se saca en limpio. Mucho menos se encuentran ideas o visiones nuevas sobre las soluciones que requiere el país. En casi la totalidad de los casos se trata de reiteraciones de esquemas del pasado, que son precisamente los que nos llevaron a este desastre. Otras son consideraciones superficiales carentes de racionalidad y fundamentos. Y lo más frecuente, es escuchar propuestas consistentes en la rutinaria repetición de viejas recetas del pasado, como si acá ni en el mundo hubiese ocurrido nada o 50, 100 o 150 años hubiesen transcurrido en vano.

 
Es que nada bueno ni claro puede salir de estas reuniones, porque en su momento no creyeron que esto que ahora nos pasa finalmente ocurriría. Por lo tanto, son personas que no estuvieron motivadas para el estudio ni para el análisis, tampoco se preocuparon por seguir la situación y, en consecuencia, no invirtieron su tiempo en adquirir conocimientos que le permitieran estar informados ni actualizados para poder comprender la realidad. Esa es la dificultad.

 

Hipótesis más probables
 

De las reuniones de referencia, surge que la principal angustia radica en definir como va evolucionar la situación y qué es lo que se puede hacer para revertir el desastre. Obviamente, en todas se termina hablando de quién tendrá el poder y cómo se puede operar para conquistarlo y, desde él, modificar la situación actual.
Tres son las hipótesis principales que se manejan – lo cual no quiere decir que no puedan existir otras-:

 
1.- Salida constitucional, con o sin adelantamiento de las elecciones presidenciales
Para ello se pretende conformar:

 
a.- El Tercer Movimiento Histórico
A cargo de la “oligarquía política-partidocrática” (entregadora del país). Procuraría preservar su poder y privilegios a fin de continuar gobernando la argentina, cualquiera sea el partido que lo haga como titular. Su expresión sintética podría ser la conformación definitiva del llamado “tercer movimiento histórico” que no es otra cosa que la cristalización del “contubernio peronista-radical” que gobierna desde 1984 y que tiene como base de maniobra a las mafias políticas y delincuenciales de la Provincia de Buenos Aires.

 
b.- El frente de izquierda y progresista
Aspiraría a coordinar o integrar a todo el amplio conglomerado de partidos y agrupaciones “marxista-izquierdista-socialista-progresista- multiculturalista”, en un único agrupamiento político-electoral, de muy difícil concreción y conducción pero el que, sin embargo, comparándolo con las otras dos alternativas, posee el mayor grado de disciplina y de encuadramiento.

 
c.- El Frente Liberal-Conservador
Se conformará por el aporte de los sectores liberales, conservadores, partidos provinciales, desprendimientos del peronismo y del radicalismo, menemistas, caballistas, grupos empresarios del establishment, grupos intelectuales y las clases alta y media alta. Con gran disponibilidad de recursos financieros, su estilo y funcionamiento serían similares a lo que en su momento de mayor expresión fueron la UCEDE y el cavallismo. 

 
d.- El Frente Patriótico o Nacional
Consistiría en agrupar a todo el espectro político considerado supuestamente “popular y nacional”, disperso en cientos de organizaciones, grupos y subgrupos (incluidos los remanentes de los grupos subversivos peronistas o filo-peronistas de la década del 70’), cuya heterogeneidad sería neutralizada por un único liderazgo, preferentemente una figura “carismática militar” y su estilo y funcionamiento serían muy similares al usado por Perón. 

  

 
2. Salidas no constitucionales 

 

a.- Modelo de “bordaberrización” 
Se conformaría como consecuencia de una alianza entre el “establishment”, los banqueros y sus colaterales financieras, medios de comunicación, empresarios supervivientes, grupos políticos e intelectuales liberales/conservadores (partidos provinciales y desprendimientos del peronismo y del radicalismo), sectores militares comprometidos con la embajada de los EE.UU. e Inglaterra, grupos antiterroristas/antisubversivos, individuos ideológicamente afines al liberalismo capitalista y remanentes del partido militar. Su puesta en acto se basaría en hechos de agitación y desborde social en gran escala, lo que propiciaría la participación activa de las Fuerzas Armadas en la restauración del orden.

b.- Golpe Cívico-Militar con apoyo o intervención política-militar extranjera
Participarían todas las organizaciones, grupos, entidades, instituciones indicadas en el punto precedente. Su puesta en acto resultaría del fracaso en la restauración del orden y la paz social por parte de las Fuerzas Armadas, la pérdida del control de importantes zonas del país, la permanencia de una situación de caos y anarquía, etc., lo que obligaría a que la OEA o las UN tomen la iniciativa de intervenir activamente en las clásicas operaciones de “reestablecimiento de la paz”
 

  
3.- Intervención política y armada extranjera (Se omite porque no hace al tema que trata esta nota) 
 

 
4.- Combinaciones posibles
El hecho de que se arribe a una salida electoral – con elecciones anticipadas o en los plazos establecidos- no implica descartar la “salida no constitucionales”
Ante la eventualidad de que el “frente de izquierda y progresista” gane la elección, es previsible la consecuente “ingobernabilidad” que generará un gobierno de esa naturaleza. A nuestro criterio, dicho triunfo es altamente probable (con guarismos muy reducidos) y constituiría la última pirueta antes del colapso definitivo del país.
Frente a dicha situación, los partidarios de la “salida no institucional”, apreciarían como altamente favorable que los “hechos propiciatorios” sean ejecutados durante un gobierno de la orientación mencionada y a poco de haberse consumado el acto electoral. De esta forma, la justificación será plena, ya que se le hará entender al pueblo que, efectivamente, se agotaron todas las instancias institucionales sin que se haya podido estabilizar la situación ni alcanzar resultados favorables (ineptitud e incapacidad para el autogobierno). 
La solución sería, entonces, la implementación del “modelo de bordaberrización” o el “golpe Cívico-Militar con o sin intervención política-militar extranjera”.
 

 
5.- Consideraciones 

 

a.- Los sectores y fuerzas que integren el Frente Liberal-Conservador carecerán de arraigo en la clase media-media y media-baja, particularmente, debido a que sus personeros y doctrinas económicas provocaron la destrucción de estos sectores y se apropiaron de su riqueza. Conforme a nuestra apreciación, este sector carecerá de significación electoral. Sólo podrá tener presencia e influencia en la medida que consume su alianza con los sectores militares para la ejecución de las “salidas no constitucionales”

 
b.- El Frente Nacional o Patriótico, si se llegara a conformar, será financiado y alentado transitoriamente - directa y/o indirectamente- por el “establishment” y los liberales. Su propósito principal será quitar adhesiones a la “abstención” y a la “nulidad del voto”, de forma tal que dichos guarismos afecten lo menos posible la “legalidad y legitimidad” del gobierno que surja del acto electoral. Por otro lado, con ello se evitará el surgimiento de cualquier formulación política genuinamente nacional que se apoye en el fenómeno de la “abstención” y la “nulidad del voto”. Por lo tanto, la consecuencia más evidente de la presencia de este sector en el escenario electoral, será la de contribuir a mantener vigente la ficción democrática-electoral y, con ello, el SISTEMA o REGIMEN de DOMINACIÓN.

 
c.- Los sectores que adhieren a la “abstención” y a la “nulidad del voto” constituyen por ahora la expresión mayoritaria de la población Argentina y ya alcanzó guarismos de intención de voto mayores a los del 14 de octubre pasado. A contrario de lo ocurrido con el apaciguamiento y posterior extinción de los “cacerolazos”, el “voto negativo” incrementó sus valores en algunas zonas del país. Conforme a la evolución de todas las formas de protesta política y social (piqueteros, gremios, CTA, etc.), es el único que no declinó. 
Por otro lado, en las elecciones del 14 de octubre pasado, tampoco la aparente nueva oferta electoral de izquierda (Carrió) ni de la derecha (PPR y otros partidos menores) pudieron cautivar al “voto negativo”. Nada indica que ahora, con el agravamiento de la situación en todos los ordenes, tampoco lo vayan a lograr.

 

 
6. Conclusiones 
El “voto negativo” constituye en la actualidad la única opción genuina contra el Sistema o Régimen de Dominación que nos rige desde 1852. Si las personas que lo encarnan, son adecuadamente incorporadas, instruidas, encuadradas y conducidas dentro del proceso de RESISTENCIA CIVIL, representan la posibilidad de constituir el germen del NUEVO PODER NACIONAL ARGENTINO.

 
Ningún PODER SÓLIDO se puede construir sobre el pantano y el marasmo que representan la confusión y las ideologías.
El NUEVO PODER deberá construirse sobre la “roca” de las ideas claras, de una nueva mentalidad, de un renovado espíritu nacional - conforme a su genuina idiosincrasia, tradición histórica y cultura Indo-Hispano-Americana-. Nunca podrá construirse nada serio sobre el fango accidental e instantáneo de los procesos electorales, inventados, instrumentados e impuestos a nuestros pueblos para beneficio exclusivo y excluyente del PODER DEL DINERO y de la USURA INTERNACIONAL.

 

 

Santiago Roque Alonso
Director

  

 

Volver


 

Periódico Patria Argentina - PatriaArgentina.org Copyright © 2000-2002

Hecho el depósito que marca la Ley 11723 - Derechos reservados.